Capítulo 5 - El lobo plateado: El líder y las decisiones

Al grupo de perros les sugerí la idea de poner un líder que de primeras pareciese dominante y fuerte, uno que fuese fiero y tuviera la mirada intelectual…


Pasaron de oírme, me eligieron a mí como líder del grupo, entre todos los grandes y tal eligieron al lobo más pequeño de la manada para representarles… Ya vamos de culo y eso que acabamos de empezar.


También me pidieron que no les llamase por su número asignado, que cada uno tenía su nombre (yo no y pues eso, pero les pedí que siguieran con el número hasta que encontrásemos uno a mi gusto)


El labrador decía que se llamaba Jodi, al menos se le veía simpático, creo que su cara trae tranquilidad, también fue al primero al que me acerqué a preguntar y el primero que me respondió, será buena idea ponerlo de mediador.


El perro al que no podía ver sus ojos se llama Ben, para acortar su nombre de Beethoven ¿Quizás está sordo? Se le ve bastante tranquilo, aunque impone mucho por su largo y pelaje, quizás sea bastante bueno tenerlo a mi lado a la hora de hablar, da un poco de respeto.


Había otro más con forma de perro, era algo así como un cruce de un Doberman, algo más gordo de lo esperado, se hacía llamar Lycan, creo que sus padres le eligieron como el súper perro o algo así, por poco me rió delante del pobre.


Los otros 3 me parecieron menos significativos, casi ni sabían hablar, les costaba, uno parecía algo así como un bulldog, pero era bastante más alto que el resto, decía que su nombre es Pochy, otro era una chica, se llamaba Sandra, su pelaje era negro y blanco, no sé que raza era, pero a pesar de la cara de inteligente es más tonta que cualquiera de los otros…


Y el último es del a raza que más detesto, una parecida a un caniche, parece tener siempre la cara roja, justo fue el único que se negó a ponerme de líder porque quería serlo él… Si tuviera que deshacerme de alguno, sin duda sería él.


Pero ya basta de presentaciones, Jodi, Ben y Lycan eran los que más hablaron conmigo este tiempo, nos centramos en intentar establecer un lugar de descanso en esa sala, uno para alrededor de 7 personas.


Entre tanto diré que se han formado casi 6 grupos, entorno a la misma cantidad que nosotros, pero han surgido varios parias, los cuales no quiero en mi grupo, osea, tengo ya 3 cargas, además de la cara de tontos perdidos que tienen esos, la mitad se lo pasaba llorando y el resto molestando a cada uno de los grupos, ¿está claro por qué no los quiero aquí?


Bueno, entre los grupos teníamos a los que se parecían más a los humanos, razas como goblins, ogros, trolls… por otra parte tenemos a los de los lagartos, con una cola bastante punzante (sospecho que alguno de ellos tienen mordedura venenosa, me parece envidiable), otros grupos se forman alrededor de lo que creo que son “hombres pez”, no he leído nada de ellos, pero parece que hablan un idioma totalmente diferente, no sé si podré acercarme, otro grupo basado en gatos, eran un poco inferior al nuestro (por alguna razón Conan siempre anda insultando a lo que creo que es su líder) .




De los otros no os diré mucho, no los he visto tampoco demasiado, osea, que son un grupo de aves, pero se la pasan todo el rato colgados del techo, mirándonos como si fuésemos presas, mientras tanto el otro grupo se ha formado entre los rechazados de las interespecies, no parecen estar muy conscientes de haber creado un grupo.


Para decirlo claro, me preocupan un poco los grupos, el grupo con el líder más capaz parece ser el de los goblins y trolls, parecen tener un líder bastante inteligente, además de ser como 10 miembros.


Espero poder hacer competencia, no pienso arriesgarme a que me descalifiquen porque un grupo me rechace.


Volviendo al tema, he conseguido aprovechar uno de las estanterías de libros y me aproveché un poco de Lycan para que fuese a recoger cojines por los alrededores y concentrarlos en una zona.


La zona que hemos elegido tiene una pequeña protección a las aves, temo un poco que nos lleguen a atacar de golpe, pero quitando los ataques sorpresa, esas arpías o pajarracos no podrán con nuestra superioridad en fuerza, también reducimos los ataques directos de los lagartos, si vienen de una dirección podemos prevenirnos.


Los hombres pez no me preocupan mucho, quizás no puedo hablar con ellos, pero no son especialmente fuertes, y con los gatos en sí nos llevamos bien, he conseguido hablar con su líder y hemos quedado en que Conan es idiota, podría poder formar una alianza entre nosotros, por ahora a Jodi y a Lycan les parece genial tener más amigos.


Ahora acabo de comprobar que las estanterías no se pueden mover en absoluto, pero no se movía ni un milímetro, con eso estoy seguro que no podrán hacernos picadillo en un instante.


Bueno, la primera noche fue bien, mantuvimos un sistema de turnos de vigilancia, yo me hice cargo del primero, del que pensaba que iba a ser el más tranquilo de hecho.


Le dije al líder gato de tomar el mismo turno que yo, se sorprendió, parecía que no iban a hacer turnos, pero como me cae algo bien decidí incitarle a hacerlo con eso de por si acaso.


A mitad del primer turno vi una sombra salir por encima mio, aproveché mis instintos y le agarré de una pierna y lo tiré al suelo… Era Conan.


- ¡Dejame, suéltame, he dicho que me sueltes! - Decía insistentemente.


El líder gato se acercó, yo creo que era claro lo que iba a hacer, asique lo solté sin miedo.


“Si crees que voy a permitir que inicies una pelea por nuestro lado con los gatos, te sacaré del grupo, es mi primer y último aviso, tú decides” Le dije con una voz seria, asegurándome que lo oyera y entendiera.


- Pero, pero… - Dijo mientras miraba algo furioso al líder de los gatos.


Está claro que simplemente los odia de manera incondicional, no sé por qué, tampoco me importa, solo sé que al menos si sigue tengo justificación para sacarle del grupo.


Ahora se me vino una idea a la mente, ¿puedo llegar a matar sin repercusiones aquí?.


Bueno, bueno, que no lo haré, no tengo intención de probar, al menos no personalmente.


Metí a Conan en nuestro refugio de nuevo, no pienso permitir que hagan algo así mientras no sospeche del líder del gato.


Osea, si tengo que hacer guerra sucia la haré, pero no creo que deba, son chicos muy pequeños, apenas sabían si les decía que algo así podría suceder.


Aproveché mi turno para coger uno de los libros de nuestro lado del estante (por si no lo mencioné, en el de al lado están los gatos, les pedí que tomasen uno de nuestros lados para poder ayudarnos mutuamente), este libro trataba de como algunas acciones de las personas profundizaban el odio que tenían los demás, lo cogí por Conan, quizás así me evite tanto problema con él.


El líder de los gatos se quedó dormido en seguida, durante su turno, bueno, aunque seamos aliados tampoco creo que pase nada la primera noche, le avisaré cuando cambiemos de turno de todas maneras.


Y así paso la noche, fuimos cambiando de turno, el único que no tuvo que hacerlo fue Conan, preferí alargar los turnos de antemano a pensar que él pudiera liarla con nuestro único aliado.




































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