Capítulo 4 - El lobo plateado: Primera prueba

Me han despertado con una sirena a tope, no sé que sucede, solo sé que mi cabeza pita, y muy fuerte. ¿Qué son esos ruidos?


- ¿Tuviste una buena noche? - Dijo de nuevo el hombre tras el cristal.


Ojalá poder hacer una estaca con uno de estos libros y clavárselo en el cuello, pero con la idea de darle las gracias.


“Sí, ¿Ahora podrían explicarme el experimento?” Dije yo, pero esta vez miré a otra de las paredes, contraria a la que era ayer.


No es como si hubiera rotado la posición de esa persona, pero quiero que crean que estoy desorientado o que no tengo memoria, no me voy a confiar.


- Esa cama que has hecho con los libros es bonita Nº 4864, no parece que hayas leído los libros, ¿o sí? De todas maneras te pondremos a prueba, no creo que un cachorro de lobo blanco sea tan inteligente a tu edad, de hecho, ningún antropomorfo podría ser capaz, pero vamos a probar - Dijo con una voz curiosa


“Puede que no me encuentre bien para hacer las pruebas, ¿podría hacerlas otro día?” Dije, lo de los perfiles bajos los aprendí ayer en ese libro, creo que me puede servir con este hombre.


- Interesante, pero lo lamento, continuaremos con la prueba, espera a que llegue alguien a tu habitación a recogerte, hablaremos en unas horas – Dijo con voz calmada, entonces se levantó de su sitio y desapareció de mi vista.


Unos minutos pasaron, el pulpo entró en mi habitación, relamiéndose…


La baba se le caía de los labios, mis instintos decían que huyera, que no podría hacer nada…


Pero algo había leído en el libro, ¿Están jugando con mi nivel de miedo y obediencia? Creo que voy a hacer algo radical


“Buenos días señor, no tengo nada para ofrecer en mi humilde celda, ¿podría no ser su comida hoy?” Pa´ que luego me digan que no soy humilde o mierdas así, sé que me quiere vivo, asique mostré una ligera sonrisa burlona.


El pulpo no lo pasó por alto, en menos de un segundo puso su cara delante de la mía.


Yo me caí al suelo de golpe, mi vista no se había acostumbrado a tenerle delante


- Chico, eres increíble, dominar el lenguaje a tu edad y en tu raza, incluso excluir el miedo y acabar con los instintos, pero esto no es una parte del examen, puedes relajarte – Quitando la baba de su cara, concluyó.


“Entiendo, disculpe” Ya estaba un poco asustado de verdad, si llega a querer hacerme daño no hubiera sido rival, pero aún creo que esto sigue siendo un experimento de subyugación de especies, la pena es que solo pueda verme a mí.


- Sigueme, no muy cerca o muy lejos, te mataré en el acto si lo incumples – Dijo con una voz tranquila.


“Una duda… ¿Qué es eso de Esta…? !PLAF!intenté preguntar… Pero me golpeó con uno de los tentáculos.


- Nadie te ha dicho que hables, solo sígueme, ¿entendiste? - Sin siquiera mirarme.


Yo estaba en el suelo, con un gran dolor en el pecho, sentía que me costaba respirar, aún así, me levanté y me coloqué a dos metros detrás de él, siguiéndole por el pasillo estrecho hasta una gran sala blanca.


En la sala blanca me encontraba yo con otros que parecían demihumanos… Al menos ya sé que el experimento es de razas antropomorfas y no es tan general, solo espero que no me intenten engañar con esto, por ahora tomaré esa hipótesis.


Pues bueno, el pulpo siguió trayendo semihumanos, aunque curiosamente yo era el más pequeño, lo que es más, posiblemente me saquen varios años.


¿Recuerdan que me puse a leer libros de demihumanos? Pues entre ellos había algo así como una raza orca, cuyo nombre no me acuerdo, pero digamos que dentro de la evolución por edad, uno de los chicos tenía al rededor de 7 años, ¿y ese otro de allí? Pertenecía a la clase arpía, entorno a 9 años podría aproximar.


Estoy seguro que todos aquí me sacan muchos años, ¿qué hago yo aquí?


- A ver, demihumanos, escúchenme bien que solo lo diré una vez, explicaré el experimento – Dijo


Para resumir, que nos encontramos aquí la mayor parte de demihumanos que hay en este continente (no sé cuantos más hay), competiremos repetidamente entre nosotros para ver que raza es la mejor, todo porque a un lord le apetece… Como siempre el dinero moviendo todo por la espalda, para diversión de un maldito noble degenerado… Pero volviendo al tema, se nos dará cierta información antes de cada prueba, que deberemos aprovechar durante nuestro tiempo libre, el resto del tiempo seguiremos haciendo pruebas.


La primera prueba, aunque no lo dijo tácitamente, tratará de quien se puede volver el rey de la colina de manera social.


En este juego solo parece haber perdedores si una sociedad te rechaza y no consigues agruparte, pero parece que habrá un regalo especial si te conviertes en el dominante, aunque sin detalles de que es…


¿Qué si quiero volverme el rey? Hmmm, podría probar, pero no tengo muchas ganas, la última vez que intenté socializar acabó conmigo destruyendo una instalación energética y con una gran cantidad de muertos… Sería gracioso probar de nuevo, quizás puedo probar otro nuevo hecatombe.


Aún así, ando mirando y parece que hay alguna que otra raza canina por aquí, creo que debería ser el grupo más adecuado para mí, osea, ¿no se supone que los perros se reconocen entre sí?


Tras terminar la charla del pulpo, él nos llevo a una sala especializada, con bancos, sillas, una biblioteca, una piscina… Digamos que era algo así como un oasis entre tanta porquería.


Yo sé que era un sujeto de experimento, pero aún no me cuadra algo, cuando sabré que es eso de Estatus, ¿se refiere a estatus social? Sería muy triste que eso sea lo que nos quieren comprobar todo el rato, tampoco me cuadra que no hayan dicho cual sería el castigo si suspendes la prueba como tal…


¿Te matarán? ¿Te compensarán? Osea, que recompensa puede haber por socializar, uno socializa para ganar un puesto de trabajo o con fines reproductivos, no sé que podemos ganar aquí donde todos tenemos lo mismo.


Bueno, no ganaré nada pensando, voy a acercarme al grupo de chuchos.


“Hola, soy Nº4864, soy un cachorro de… Lobo Blanco… ¿Os importa si me uno?”


El grupo se quedó totalmente aturdido ¿No se esperaban que pudiera hablar?


Para cuando reaccionaron, se tomaron una pausa y me dijo uno de los que parecía mas mayores, me recordaba a una raza de labradores -Si, si, esperábamos que vinieses, pero… ¿Cómo hablas tan bien? ¿Es algo de los lobos blancos? -


“Mmmm, no sé, no he conocido a ningún otro como yo, pero muchas gracias por recibirme… Bueno, ¿qué andáis haciendo?”


- Estamos comparando datos, osea, a algunos nos secuestraron, a otros nos vendieron y al final acabamos aquí, intentando aprender a leer unos libros complicados, estamos perdidos” Dijo uno con mucho pelo, casi ni se veían sus ojos por ese follaje.


“A mí me atacó el pulpo mientras huía del orfanato, la señora encargada me vendió… Y de esos temas, yo no sé para que nos han hecho leerlos si la primera prueba parece que tenemos que nombrar un líder” Dije, como si fuese bastante obvias sus intenciones


El grupo de 6 se sorprendió, exclamaron - ¿¡Un líder!? - Se me pegaron todo lo que pudieron, casi ni podía respirar


“Si, dejar que me explique, los libros de psicología que nos dejaron y todas esas novelas y matemáticas estaban para que pudiéramos organizar una jerarquía en este lugar, y está claro que se tiene que organizar un sistema social basado en grupos como el nuestro, pequeñas sociedades… Estoy seguro que nos harán competir para ver quien tiene el grupo dominante y hacer que elijamos un líder a cargo, los que no entren en la sociedad o al que el líder rechace posiblemente acaben… ¿Muertos? ¿Castigados? No sé… Puede que suceda así.” Dije de forma tranquila.


Los perros se quedaron totalmente anonadados, no sabían nada o algo así… Me tuve que juntar con el grupo más tonto, todo esto es por la manada, eso debe de ser…



Comentarios

Entradas populares de este blog

Capítulo 3 - El lobo plateado: Lugar desconocido

Capítulo 12 - El lobo plateado: Nuevo amanecer