Capítulo 10 - El lobo plateado: La venganza carmesí

 Tomé un respiro, jamás me había sentido así.


Cada paso que daba eran cientos de metros en pasillos oscuros.


Le escuchaba llorar, “¡¿Qué te pasa pulpo, tienes miedo?!” Dije, cada vez se formaba algo que le costó aparecer en su tiempo, una sonrisa, desde un lado a otro en mi cara, mis dientes se podían ver, mi pelaje resplandecía ante las luces de emergencia.


Cada pasillo, cada curva, le dejaba sentir una de mis garras quitando uno a uno de sus tentáculos, podía alcanzarle a esta distancia, pero es más divertido pensar que puede huir.


- ¡No, no, no, vete, no tuve opción, perdoname la vida! - Dijo entre lágrimas.


Mis instintos reaccionaron, debo tener cuidado, acabar con este juego ya.


Apunto de cortarle la cabeza con las garras, una puerta metálica se cerró entre nosotros.


Le dio unos segundos preciosos, bueno, al menos el tiempo en el que yo destrozaba la puerta hermética.


“NO TIENES DONDE HUIR MALDITO PULPO” Cada vez, sentía que mis palabras se volvían notoriamente infernales a los oídos.


El pulpo reabasteció sus lágrimas, para seguir implorando perdón.


Incluso si esto está producido por mis habilidades, me las va a pagar.


Antes de que pudiera hacer nada un grupo de semihumanos se puso entre él y yo.


“Esa cara… no puede ser” Se me habían ido todas las ganas de luchar de golpe.


Jodi estaba delante de mí, tenía heridas por todo el cuerpo, había no más que 6 demihumanos delante de mí, solo quedaba él en la manada, el resto era el chico conejo, dos goblins y otros dos, los cuales, estoy seguro que estaban en los desterrados.


Tengo algo de curiosidad, fui a decir algo.


“Jod…” Me atacó de golpe, siquiera me dejó tiempo a hablar.


- PUTO TRAIDOR, POR TU CULPA, TODO ESTO ES POR TU CULPA, BEN, LYCAN, POCHY CONAN, SANDRA… TODOS HAN MUERTO POR TI, NO TE LO PERDONARÉ – Su mano poseía suficiente fuerza como para igualar al tentáculo que recibí antes del pulpo, aunque no la suficiente como para hacerme daño.


Parece que todo el grupo de delante tiene algo contra mí, aunque lo de traidor, si, vale, que me he pasado mucho tiempo y dejé la posición de líder, pero no tenía opción, la cagué hace 8 años atacando a los lagartos.


Bueno, lo que sea. “No puedes hacerme daño” Dije de forma sarcástica. “Estorbas, hablaremos cuando acabe al pulpo”.

En coro – MORIRÁS - .


Jajajajjaja, ¿Qué estos pueden matarme a mí?


Ya han perdido toda individualidad, el lavado de cerebro es masivo.


Quitando a Jodi, el resto no me importa si viven o mueren.


Justo cuando Jodi cargó un ataque especial, aproveché para moverme detrás de él.


Decapité al grupo entero detrás de Jodi sin que lo llegaran a notar.


Creo que me encanta la forma de decapitación desde hace tiempo, es un método limpio, rápido y en su mayoría indoloro, creo que aún tengo buenos recuerdos de la guillotina en los viejos libros de historia.


Lástima que en este mundo no haya guillotinas, quizás deba reinventarla.


Dejando mis divagaciones aparte, parece que las cabezas y los cuerpos recién se enteran que se han separado, las cabezas se soltaron, como si un hilo hubiera pasado por ellas.


“Jodi, tu grupo está muerto, en un rato volveré a verte, tengo cosas que hacer”


Y dejando más que el sonido de mi paso, volví en mi caza del pulpo.


No creo que esté muy lejos, tampoco puede huir de mi sentido del olfato y oído.


Es desconcertante, a veces se cree que lanzando restos de tentáculo en el camino contrario voy a pararme a dudar.


No tiene dudas de que habré matado a estas alturas a todos los demihumanos, como si fuesen peones de sacrificio.


Bueno, no lo culpo, hubiera hecho algo igual en su situación.


Ya me estaba cansando, decidí apretar más fuerte mi velocidad.


Mi cuerpo sentía curvar la materia, sentía la presión del viento en mi pelaje, el cual se expandió y se retrajo en segundos, pasé a correr a dos patas.


Las curvas parecían no tener fin, estaba todo el rato haciendo curvas.


Le encontré.


“Bueno bueno, ¿Te importa parar? Me debes 8 años de tortura” Dije, colocándome justo delante de él.


Intentó golpearme con todos los tentáculos, adivinad cuantos cortes pude hacer en ellos.


Salió polvo de donde había tentáculos.


Ya no puede correr.

Entonces se puso a hablar en voz alta, chupando el suelo.


“¿Un sacrificio de sangre? Ja, dile adiós a tu lengua” Y la corté.


Chilló como un descosido.


Dejando claro eso...


Ahora vamos a ir a extremidad por extremidad, vamos a ver cuanto dolor puede experimentar un monstruo como él.


Tras una hora de investigaciones profundas con el pulpo, descubrí que se ha muerto, parece que perder más de la mitad del cuerpo y obligar a comerse cada parte en rodajas le causó un shock tan fuerte que murió.


¿Qué no era este mundo muy duro?


Hmmm, pues nada, que haré, todavía no me siento satisfecho.


Ahora, entre todo lo que se me ocurría, recordé al vigilante.


Jaja, haré que me cuente quién lleva este experimento, de seguro quiere conocer los resultados.


Volví corriendo a la sala de experimentos.


Pero pasé primero por la sala donde Jodi estaba, le prometí que hablaremos después, pero parece que no está aquí.


Si que ha pasado tiempo, la sala está totalmente destrozada, un montón de sangre por las paredes, el lugar donde estaba el refugio con los cojines se ha transformado en una pila de cadáveres.


Entre ellos, uno de los que podía reconocer era Vora.


Bueno, no pude cumplir la promesa, me hubiera gustado, pero como digo, la culpa al pulpo.


Ja, debo estar volviéndome loco, ahora siento que es mi culpa que todo esto haya pasado por la matanza que hice a ese grupo de lagartos.


Que le voy a hacer, si volviera al pasado hubiera tomado la misma ruta de acción.


Visto que Jodi hace tiempo que se ha ido, y cuyo olor parece haber desaparecido por completo, decidí volver a la sala del vigilante.


Rompí la pared, “AQUÍ VIENE EL LOBO FEROZ” soplaré y soplaré y a todos yo os mataré.


A ver, parece que no me escuchó nadie, he dicho algo súper ridículo.


Esto quedará para los anales de mi memoria.


Bueno, parece que el vigilante tiene un rastro de olor.


Utilicé mi velocidad a 4 patas.

El viejo no era tan rápido como el pulpo, alcanzarle no me llevó más que unos minutos.


Está dentro de un armario.


Viejo patético, vas a disfrutar.


Volqué el armario, de manera que las puertas estuviesen contra el suelo, no podría abrirlo.


“¿Disfrutando las vacaciones en las Bermudas?” dije, sin compasión.


Este me va a durar más.


Para empezar, ¿Qué tal si fijo el armario al suelo?


Mi mano se mueve a alta velocidad, parece vibrar.


El metal en el suelo parece fundirse con los movimientos de mi mano.


En el acto, el suelo y los bordes del metal se habían conectado.


“Bueno, quiero que experimentes una bonita vida, espero poder disfrutar mucho”


Ya no contenía mi risa, ¿Qué puedo pedir más?


Tengo una idea de que hacer, aunque no me decido, sé que si intento pasar electricidad por el bloque, puede que actúe como jaula de Faraday, podría hacerlo por calor, pero no sé si me podré contener a la hora de comer viejo asado.


¿Sabrá mal un humano?


Bueno, tengo curiosidad de ambas, pero tengo de una más.


Activé la alarma de humo, instantáneamente se puso a llover dentro de la sala.


Reuní una gran cantidad de agua, metiéndola por un agujero del armario, hasta sentir los labios del viejo en el agujero.


Jaja, tengo que hacerlo.


Sin contenerme quemé los bordes del agujero, sus labios se hincharon y gimió como un burro.


No creo que ahora pueda rogar por su vida, me parece genial.


Ahora vamos con otro agujero, voy a meter calor y electricidad.


Con suficiente velocidad en mi mano, en giros adecuados, se empezaron a formar chispas, en mi otra mano, las chispas habían generado algo de calor, que pude mejorar a tope, parecía un Sol enano.


Venga, va la bola de fuego primero.


Creo un gran cráter en la superficie del agua, que pasó casi a vapor.

Y entonces metí la mano cargada de iones en el agua.


Explotó.


El armario y la sala en sí estaban destrozadas.


Solo llovía sangre.


Si preguntáis, todo detrás de mí se encontraba notablemente menos dañado que yo.


Osea, he cambiado las propiedades del vapor del agua, se volvió gas butano al añadir suficientes iones, el resto era polvo del propio armario, a la vez que las altas temperaturas resultando en una atmósfera explosiva que genera una explosión de polvo y de gas butano.


Viendo el calor que aún queda en el aire, mi ropa totalmente combustionada y mi pelaje lleno de polvo, puedo decir que tiene fuerza.


Por el lado bueno, soy inmune a las bombas de este calibre.


Mejor no os digo cuanta información tengo de explosivos, por vuestra salud.


Bueno, parece que el calor ha deformado totalmente la sala, que en un inicio tenía una forma más rectangular.


Ahora incluso puedo ver una sala en el piso superior.


Saltaré hasta allá, se me pasó preguntar quien dirigía el experimento, pero no estoy apurado en absoluto.




Notas del autor:


El autor, de alguna manera u otra, os pregunta a todos los lectores sobre como ellos ven el progreso de la novela, si ven si está bien escrita y la encuentran interesante, cualquier cosa que le ayuda la verá correcta.

También encuentra curioso el hacer la novela totalmente desde el punto de vista de un personaje principal, el cual aún no tiene nombre, pero que se lo otorgará en siguientes capítulos ya escritos.

Añadir, de paso, que reformará la página del blogger, ya que actualmente ve que se empieza a hacer complicado el hecho de empezar de cero.

Y os manda saludos.


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